Se produjo por la explosión de una bomba dentro de la iglesia mientras los fieles estaban dentro rezando poco antes de las 10 de la mañana hora local, coincidiendo con las celebraciones del Domingo de Ramos, inicio de la Semana Santa. La explosión tuvo lugar en las primeras filas cerca del altar. El resultado provisional es de al menos 25 personas muertas y 60 heridas.[1]
El atentado se perpetró 20 días antes de la visita del Papa Francisco en su primer viaje a Oriente Medio del 28 y 29 de abril.
El papa de la Iglesia Copta, Teodoro II, que se encontraba en ese momento en el interior de la catedral, donde presidía la ceremonia del Domingo de Ramos ha escapado ileso según medios egipcios
El Papa Francisco condenó el atentado haciendo un llamamiento a los terroristas, fabricantes de armas y traficantes a parar.[6]
En Egipto el primer ministro egipcio Sherif Ismaïl condenó el atentado señalando "la determinación del Estado a erradicar tales actos terroristas y eliminar la raíz del terrorismo negro". La universidad de Al Azhar condenó este ataque contra "inocentes" y denunciando que el objetivo era la división del país.